Mujeres uruguayas: el lado femenino de nuestra historia
Mujeres uruguayas: el lado femenino de nuestra historia, es un libro que llegó a nosotros por casualidad. Es un retrato de 11 mujeres realizado por 11 mujeres. Para los habitantes del país sudamericano, es un libro imperdible.
Mujeres uruguayas: el lado femenino de nuestra historia, es un libro que intenta rescatar en la memoria de Uruguay la obra y naturaleza de 11 mujeres que marcaron la historia de ese país incrustado entre Brasil y Argentina.
Recientemente el Uruguay es conocido por el fútbol, con un Luis Suárez a la cabeza, o en materia política por José «Pepe» Mujica, ex presidente de la república con pasado revolucionario y actual senador.
Pero Mujeres Uruguayas brinda otro enfoque, tan profundo como necesario. Es un libro de muchos años y no sabemos si todavía está en el mercado. Nos llegó usado y por eso de tener mucha cantidad de libros quedó guardado en algún cajón. Al igual que con esas 11 mujeres uruguayas, ese libro fue rescatado de nuestro depósito y aquí estamos recomendándolo.
Sabemos que ya ha salido el tomo II donde se aborda la vida de 45 mujeres, pero todavía no hemos accedido a él.
Muchos escritores y periodistas uruguayos tienen una prosa maravillosa y una técnica especial para comunicar. Las mujeres uruguayas también se han destacado a lo largo de la historia, como Juana de Ibarbourou (Juana de América, quien recibió la visita en su casa nada menos de Federico García Lorca y que la leyenda dice que hechizó por su prosa y belleza a Jorge Luis Borges, y cautivó a la distancia a Miguel de Unamuno), María Eugenia Vaz Ferreira o la fulgurante obra de Delmira Agustini.
Pero el libro no solamente hace referencia a la vida de mujeres poetas, también vemos la importancia de Ana Monterroso de Lavalleja o Bernardina Fragoso de Rivera en la lucha por la independencia ante España y en la formación de un nuevo país en América del Sur. Ambas gestionando e intrigando en una política dispar en la tibia ciudad de Montevideo y a lo largo de la campaña oriental.
Vale la pena leer la vida cruda de Rosa Luna, una mujer afrodescendiente que se ganó el corazón de los uruguayos por su despliegue artístico en el Carnaval, como también el reflejo de Cándida Díaz de Saravia o los conflictos de Blanca Luz Brum, quien pasó de la lucha revolucionaria comunista a codearse con las altas esferas reaccionarias.
Destacable también es el aporte a la memoria de Carlota Ferreira (quien enamoró a Horacio Quiroga); su retrato pintado por Juan Manuel Blanes en 1883 perdura en el imaginario histórico de los uruguayos, en un modelo de belleza ya perimido.
Cierran el libro Patrona Viera y Margarita Xirgu, dispares mujeres en muchos sentidos.
Realmente el libro Mujeres Uruguayas: el lado femenino de nuestra historia, invita también a replicar la iniciativa en el resto de los países. Sin dudas ya resulta un deber histórico rescatar la obra y participación de distintas mujeres en los procesos sociales y políticos de hispanoamérica.
